Sentada en la playa y desde la posición donde me encuentro
puedo observar a dos niños pequeños, jugando en la orilla del mar. Con la pala
y el rastrillo, construyen un lindo castillo donde imaginan que viven vasallos
y bellas princesas de rubios cabellos.
He recordado con horror lo he que visto esta mañana en la
televisión, como han bombardeado escuelas y hospitales en Gaza. Niños con la
mirada triste que no tienen nada, rodeados de escombros, hambre, miseria y destrucción.
Sólo les queda el miedo. Niños inocentes, que no han hecho ningún mal y que
tienen que sobrevivir con el terror a ser bombardeados en cualquier momento,
esperando y temiendo que este puede ser
el último día de su vida.
Como hay en el mundo personas que permiten tanta crueldad y
puedan dormir tranquilos…
Creado por Maruja. J. Galeote.